Asuntos relacionados con el ayuno (29ª parte)
Reglas sobre el ayuno de las mujeres (2ª parte)
Si una mujer sabe que le vendrá el período al día siguiente, debe continuar con la intención y seguir ayunando; no debe romper el ayuno hasta ver la sangre.
Es mejor que la mujer que menstrúa permanezca natural y acepte lo que Allah ha decretado para ella sin tomar ninguna medicación para evitar el sangrado. Debe estar conforme con lo que Allah acepta de ella rompiendo su ayuno durante el período y recuperando esos días más adelante. Así lo hacían las Madres de los Creyentes y las mujeres de los Sálaf. (Fatáwa al-Laynah al-Daaimah, 10/151).
Aún más, existen evidencias médicas que demuestran los problemas colaterales ocasionados por todo lo que se toma para detener el sangrado menstrual, provocando que muchas mujeres tengan períodos irregulares como resultado. Sin embargo, si una mujer hace eso y toma algo para detener la hemorragia y luego ayuna, es aceptable.
La istihádah (metrorragia) no tiene ningún efecto en la validez del ayuno.
Si una mujer embarazada pierde el embarazo y el feto tiene forma o se puede distinguir alguna parte del cuerpo, como la cabeza o la mano, entonces su sangre se considera nifas (posparto). Por el contrario, si lo que ella expulsa se parece más a un coágulo (alaq) o un trozo de carne (mudghah) sin rasgos humanos, su sangrado es istihádah (metrorragia). Si puede, debe ayunar, de lo contrario, puede romper el ayuno y recuperarlo más
adelante. Una vez que la mujer quede limpia después de una operación para limpiar el vientre (raspaje), debe ayunar. Los sabios sostienen que el embrión se considera con forma después de los 80 días de embarazo.
Si una mujer recupera la pureza de nifas antes de los cuarenta días, debe ayunar y realizar el ghusl para poder orar. Si el sangrado vuelve dentro de los cuarenta días posteriores al parto, debe dejar de ayunar, porque sigue siendo nifas. Si el sangrado continúa después del día cuarenta, debe tener la intención de ayunar y realizar el ghusl (según la mayoría de los sabios), y todo sangrado que venga más allá del día cuarenta se considera istihádah (metrorragia) a menos que coincida con el momento habitual del período, en cuyo caso se considera menstruación.
Si la mujer que amamanta ayuna durante el día y ve una gota de sangre durante la noche a pesar de haber estado limpia durante el día, su ayuno sigue siendo válido.
Según la opinión más correcta, una mujer que está embarazada o en lactancia se considera que está impedida, en su estado similar al de los enfermos, por lo cual está permitido que no ayune. Solo tiene la obligación de recuperar más tarde los días perdidos, ya sea que tema por sí misma o por su bebé. El Profeta (sws) dijo:
"Allah ha relevado de la obligación de ayunar y de una parte de la oración al viajero, y ha relevado de la obligación de ayunar a la mujer embarazada o que amamanta."
Si una mujer embarazada ayuna y sufre alguna hemorragia, su ayuno es válido y no se ve afectado en absoluto.
Diario de Un Musulman
Diario de Un Musulman
No hay comentarios:
Publicar un comentario